Dos gigantes de la publicidad se enfrentaron por un contrato de 112.000 millones de pesos. ¿Cuál fue el ganador y cómo fue el proceso?
El pasado 30 de abril, la Defensoría del Espacio Público (Dadep) adjudicó a la firma Eucol, conformada por los franceses JCDecaux y Caracol, un contrato por 112.000 millones de pesos para construir y administrar el mobiliario público de Bogotá por los próximos 15 años. Por mobiliario público se entiende paraderos de buses, casetas, bancas y vallas publicitarias.
En este caso, el Distrito no pondrá el dinero. Eucol deberá invertir en la ciudad esos 112.000 millones de pesos y la firma recuperará esa inversión con las ganancias que obtenga de la explotación comercial de los 15 años de administración de ese mobiliario.
Durante ese tiempo la firma debe garantizar que el nuevo mobiliario incluya transmisión de datos en tiempo real de las rutas de transporte e información institucional. Además, debe contar con puntos de carga para la ciudadanía, iluminación solar y conexión wifi. Eucol tendrá que pagarle al Distrito un mínimo de 2.157 millones de pesos al año, pero esta cifra podría llegar a ser mayor, pues el ganador de la licitación deberá pagar el 7,75 por ciento de las ventas de publicidad que se hagan en las vallas de los paraderos.
La licitación fue originalmente estructurada durante la administración de Enrique Peñalosa y la decisión final quedó en manos de la actual alcaldesa, Claudia López, quien después de elevar las consultas jurídicas finalmente la adjudicó. Esta licitación es necesaria, pues garantiza el mantenimiento del mobiliario de la ciudad, las reparaciones, los traslados y las nuevas construcciones.
La adjudicación tenía dos proponentes: Eucol y Tips Media. El primero se quedó con la licitación porque ofrecía 7,75 por ciento sobre las ventas de publicidad para el Distrito, mientras que Tips Media, conformado el Grupo Ethuss, Construimos y señalizamos y Efectimedios, ofrecía el 6,09.
Los concejales Rubén Torrado, de La U, y Martín Rivera, de la Alianza Verde, han llamado la atención que en el pasado la ciudad ganaba el 15 por ciento sobre las ventas de publicidad y ahora ganará 7,7 por ciento. Para él “es un error” que en la licitación no se estableciera el porcentaje que ganaría la ciudad, pues en otras ciudades como Medellín y Cali sí se hizo.