Este lunes 4 de noviembre, se eliminó de la reforma a la justicia que cursa en el Congreso de la República, el polémico artículo séptimo que proponía dar rebajas en las penas para quienes cometieran delitos contra los menores de edad. Celebro esta decisión que procede de una iniciativa de la Fiscalía, el Ministerio de Justicia y la Corte Suprema y que busca proteger a nuestros niños, niñas y adolescentes.
Espero que si esta reforma es aprobada, se reduzca la impunidad en los delitos de violencia contra los menores y que las condenas sean aplicadas como debe ser, pues no puede ser posible , que como leí hoy en la prensa local, “un delito con condena, en materia penal, pueda demorarse hasta cuatro años”, en que esta se haga efectiva, manifesto el concejal Rubén Torrado.
Y es que las cifras de violencia contra los menores, el abuso físico, emocional y sexual, es cada vez mayor en el mundo, en Colombia y en Bogotá. “A nivel mundial , 1 de cada 2 niñas y niños, entre 2 y 17 años sufre algún tipo de violencia cada año. El 58% de los niños y las niñas en América Latina sufrieron abuso físico, sexual o emocional en el último año. El 15% de las niñas y el 8% de los niños en Colombia experimentaron violencia sexual antes los 18 años, según lo informado por jóvenes de 18 a 24 años”.
En Bogotá, según el Instituto Nacional de Medicina Legal, en el 2023 se registraron 7.229 casos de violencia contra niñas, niños y adolescentes. Y según cifras de la Secretaría de Salud, en el 2023 se registraron 12.446 casos de abuso sexual en contra de menores de edad; las cifras se han duplicado si tenemos en cuenta que en el 2020 se presentaron 5.112 casos. Y entre enero y abril de 2024, las cifras aumentaron un 34,6% con respecto al mismo período del 2023.
“Es prioritario, que la Corporación trabaje para que en nuestra ciudad, fortaleciendo los programas de salud, prevención y respuesta ante hechos victimizantes, especialmente, en lo referente a las víctimas de acoso o abuso sexual, sin olvidar que el agresor de niños debe ser judicializado y castigado y las víctimas protegidas para no ser revictimizadas. Así mismo, es prioritario luchar por superar la impunidad en este tipo de delitos, que si no se judicializan con todo el peso de la ley, pueden conllevar a dejar en libertad delincuentes, que sin lugar a dudas, pueden atacar a nuevas víctimas”, expreso Torrado.